Ingredientes
- 1 taza de arroz Arborio
- 500 gramos de camarones, pelados y desvenados
- 1 cebolla, finamente picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 1/2 taza de vino blanco seco
- 4 tazas de caldo de pollo caliente
- 1 taza de queso parmesano rallado
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- Perejil fresco, picado (para decorar)
Resumen
Receta Risotto de Camarones Este risotto de camarones es una mezcla exquisita de arroz cremoso y camarones jugosos. Risotto de Camarones tiene la técnica de añadir caldo gradualmente garantiza la textura perfecta, mientras que el queso parmesano y la mantequilla aportan riqueza al plato. Risotto de Camarones Perfecto para una cena elegante o una ocasión especial, esta Receta Risotto de Camarones deleitará a los amantes de los mariscos y a quienes disfrutan de sabores sofisticados. Risotto de Camarones
Pasos
1 Hecho | En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén tiernos. |
2 Hecho | Agrega el arroz Arborio y cocina durante unos minutos, revolviendo constantemente, hasta que el arroz esté ligeramente dorado. |
3 Hecho | Vierte el vino blanco y cocina hasta que se evapore el alcohol. |
4 Hecho | Comienza a agregar el caldo de pollo caliente, una taza a la vez, mientras revuelves constantemente. Añade más caldo a medida que se absorbe, hasta que el arroz esté tierno y cremoso. |
5 Hecho | En otra sartén, saltea los camarones con sal y pimienta en mantequilla hasta que estén rosados y cocidos. |
6 Hecho | Incorpora los camarones cocidos al risotto, mezclando suavemente. |
7 Hecho | Agrega el queso parmesano rallado y mezcla hasta que se derrita y el risotto adquiera una consistencia cremosa. |
8 Hecho | Rectifica la sazón con sal y pimienta según sea necesario. |
9 Hecho | Sirve el risotto de camarones caliente, decorando con perejil fresco picado. |
10 Hecho | Puedes agregar un toque de limón fresco al final para resaltar los sabores. |
11 Hecho | Ahora a comer con alegría y sin remordimientos… con amargo y dulce. ¡Wow! |